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lunes, 6 de febrero de 2017

El comunismo/socialismo si funcionan

llevo eones de no publicar en este blog que nadie lee así que para desempolvar un poco este blog pitero compartiré una interesante información.

 

antes que nada no soy partidario de ninguna ideología política ya que para un servidor estas solo dividen a la gente y los hacen esclavos de convicciones inútiles sin embargo varios sistemas político-sociales han “funcionado” o por lo menos han permitido la existencia de una sociedad estable como lo que actualmente se maneja mediante la economía con el capitalismo

 

algunos idealistas políticos verán como una gigantesca falacia, pero los hechos y resultados son indiscutibles, pero a pesar de las creencias políticas de algunos el sistemas políticos, social y económicos socialista y comunista no solo funcionan si no que existen hasta la fecha. explico:

 

Todos sabemos que existe en América los poblados Amish, Huterita y Menonita en esas comunidades NO se autodenominan ni socialista ni comunista, pero si vamos a la definición de estas palabras no es encontramos lo siguiente:

SOCIALISMO

“El socialismo es el control por parte de la sociedad, organizada con todos sus integrantes, tanto de los medios de producción y comunicación como de las diferentes fuerzas de trabajo aplicadas en las mismas”

COMUNISMO

“El comunismo es una forma de organización social y económica caracterizada por el control y planificación colectiva de la vida comunitaria, la abolición de la propiedad privada sobre el trabajo y los medios de producción, y la eliminación de las clases sociales.1

Y entonces donde esta la relacion?

En aquellas comunidades independientes se siguen de esa manera de organizarse como sociedad ya que la misma sociedad controla los medios de producción osea todos trabajan para la prosperidad de la sociedad la cual no esta controlada por ninguna propiedad privada si no por la misma comunidad, veamos como funcionan estas comunidades como por ejemplo los Amish:

Trabajo y ocupaciones

Los amish también destacan por su eficiente trabajo en la agricultura. Procuran producir sus propios alimentos en la medida de lo posible, aunque esto no significa que no lleguen a comprar productos de fuera, incluso de pequeños almacenes. Algunos amish dedicados al cultivo han adoptado con entusiasmo los productos modificados genéticamente por su alta eficiencia.

Recorridos en coches amish ofrecidos en guía turística enShipshewana (Indiana).

Los hombres generalmente se dedican a la construcción o al campo. Si tienen suerte, suelen tener áreas de cultivos fructíferos de donde obtienen sus productos vegetales. A menudo hay granjas amish de donde obtienen alimentos para elaborar sus propios productos lácteos, tales como leche,queso, helado, etc.

Las mujeres, por su parte, se dedican al hogar y a la crianza de los hijos, aunque los padres también participan en ésta. Los artículos decorativosusualmente no tienen relevancia en la vida de los amish, por lo cual no se destaca la artesanía más que a los alrededores externos de sus comunidades, donde también suelen haber actividades turísticas de la gente que va a conocer sobre su estilo de vida.

y que tiene que ver todo esto??? diran. pues aunque no se autodenominen ni comunistas ni socialistas, si un dia decidieran proclamarse asi nadie se los podria debatir, mas aun es prueba de que esas mal llamadas doctrinas si funcionan.
esto solo fue un breve resumen les dejo un interesante post que encontre del blog ClioPeru:

http://clioperu.blogspot.mx/2013/06/el-comunismo-amish-huterita-y-menonita.html

El Comunismo Amish, Huterita y Menonita.

Comunismo

Por: Gregorio Martínez (Escritor)

Aunque la Unión Soviética ya está muerta y con cemento encima, y China ha vuelto al redil capitalista como una mansa ovejita bajo el pastoreo de Estados unidos, mientras Cuba accede coqueta ante la metida de mano del imperio británico que le ofrece establecer inocentes campos de golf, ya no burdeles, sea como fuere, el caso concreto es que el COMUNISMO, así con mayúsculas, está vivito y coleando.

Me refiero, sin metáfora de ningún tipo, al comunismo real e histórico, constituido por las comunas Amish, Huterita y Menonita que existen, bajo un manto de silencio, en Canadá, Estados Unidos, México y Paraguay. Comunismo radical, ese que dicta que cada quien rinda según su habilidad y reciba según su necesidad; no el socialismo mediatizado que existió en la URSS que, por decisión de Lenin, quedó anclado en el pago de acuerdo al trabajo realizado, sin considerar si alcanzaba o no para mantener a la familia.

Esas comunidades agrarias, que derivaron del movimiento anabaptista que estremeció Europa en 1524, cuando Thomas Munzer inició la guerra campesina contra los emperadores, reyes y el pontífice romano, dichas comunas poseen actualmente la más alta productividad agraria, según fuentes de Naciones Unidas, por encima de la agroindustria de Estados Unidos y de los países ricos.

De paso arrasan con el mito de la tecnología. Esas poblaciones que practican un comunismo pleno que los ideólogos marxistas jamás han mencionado, cultivan la tierra a pulso, solo con lampa y azadón, mula y arado, esto por principio doctrinario. Únicamente los menonitas, luego de minucioso análisis, concluyeron que no trasgredían los principios de Dios si usaban tractor para roturar la tierra. Pero amish y huteritas continúan solo con la mula.

Entre tales comunas que datan del siglo XVI y las comunas que establecieron los hippies en la década de 1960, no hay punto de comparación. Eso de los hippies sí fue puro idealismo metafísico, como diría un marxista esquemático. Por esto las comunidades hippies se diluyeron igual que sal y agua, al ritmo del bolero cumbia que cantaba Iván Cruz.

En las comunas anabaptistas no hay electricidad ni teléfono, cine ni radio, menos televisión o computadora. Se movilizan en carruaje tirado por un caballo. La educación es solo primaria y la única ocupación es la actividad agropecuaria.

Nunca se ha dado el caso de un desertor anabaptista que afuera despotrique contra el régimen que norma la vida en la comuna. No hay un Eudocio Ravines, secretario general del PCP, que escribió “La gran estafa” contra la Unión Soviética. Mi amiga Mary Ann Kirkby, hija de una familia desertora, ha publicado el libro “Yo soy una huterita”, mas no presenta queja alguna contra la comunidad donde nació. Ella narra cómo fue su vida de niña dentro de la comuna y la lucha de su padre para sobrevivir en el mundo exterior, donde no había la casa y la comida asegurada, y menos el banquete dominical con pato al horno y las deliciosas tortas que amenizaban el yantar de cada día en el comedor colectivo.

Pese al origen religioso, en las comunas anabaptistas no existe templo ni sacerdote. La ceremonia semanal de gracias a Dios se hace cada vez en una casa diferente. Así se evita el germen del poder y el origen del Estado. Si un marxista esquemático cree que se trata de comunismo cristiano, le recuerdo que el principio: “De cada uno según su capacidad y a cada uno según su necesidad”, esto lo tomó calladito Karl Marx de la Biblia, Hechos 4:35. Ya en la práctica Lenin estableció la norma socialista: “A cada uno según el trabajo realizado”.

Aún no sé si fue crasa ignorancia o sectarismo lo que llevó a los países socialistas a ignorar el modelo comunista más logrado y próspero que existe en el mundo real. ¿Por qué Cuba no ha tenido la menor curiosidad por ver cómo funcionan, con tanta productividad, las comunas menonitas? Cerca, en México, existe una que provoca envidia en los pobres campesinos nativos.

Fuente: Revista Caretas n° 2286 (Perú). 06 de junio del 2013.

que podemos sacar como conclusión???

 

“viva el socialismo abajo el capitalismo salvaje!!!!”

NO

simplemente que lo que son, como dije, mal llamadas doctrinas de socialismo y comunismo solo están basadas en el comportamiento y necesidad natural del ser humano y al ser natural esto, funciona,  si no funcionara no habríamos pasado de la edad de piedra.

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